lunes, 22 de septiembre de 2008

Memoria histriónica I - Sesión Truchetti



Cuando Bone nos ofreció pinchar un viernes de mayo en el Borsa supimos que debía cambiar de camello. El Bar Borsalino, uno de los locales más emblemáticos de esta nada emblemática ciudad, es de esos pocos bares en los que todavía se le puede meter el morro a una pinchoasinha mientras suena musicota de la buena. Es también el templo donde la beautiful people se conjura las tardes de los domingos para hacer frente a la resaca y el Carrusel Deportivo. Pero, por si todo esto no fuera suficiente, un motivo más ha venido a sumarse para hacer de este garito un lugar de peregrinaje obligado para españoles de pro y pedigüeños con los huevos colganderos, como los hare krishna: desde la memorable Sesión Truchetti, el Borsalino es Territorio Moscatel. Así es: ante la imposibilidad de plantar nuestra pica en lugar más placentero (y dado que Flandes está de un trillado que asusta), moscatelizamos a despampanantes hembras y varones asexuados en una noche irrepetible. Y así de ingeniosos nos mostrábamos en el e-mail promocional:

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¿Últimamente buscas ropa en el armario de tu madre?
¿Llevas un par de meses merendando chopped?
¿Las fiestas del equipo de rugby se han convertido en tu plan prioritario?
¿Distingues más de seis tipos de rosa en el catálogo de IKEA?
¿Sales de fiesta embadurnado de aceite y la música de los bares no logra despertar tu lado más salvaje?

¡NO SUFRAS MÁS!

¡El DÚO MOSCATEL, los DJs que más entienden, se proponen petar la noche! Con sus boas de plumas y musicón a tutiplén, ofrecen, con más orgullo que nunca, su magna

SESIÓN TRUCHETTI,

una velada de música sin complejos y con el paso cambiado que pervertirá el bar más rockero de la ciudad. Este viernes 30 de mayo, a partir de las 00:30 h, en el Bar Borsalino (c/ San Blas, junto a San Miguel) y por tu cara bonita.

¡Muerde el anzuelo del Dúo Moscatel! Garou y un servidor te esperamos con una flor en el ojal y un corcho en el bolsillo.

Si has llegado al final de este mail te mereces un pequeño anticipo...

<a href="http://www.grapheine.com">Grapheine : Communication agency - graphic designer free-lance directeur artistique Paris Lyon</a><noembed> </object>

Y recuerda: mientras no se demuestre lo invertido, ¡hasta el rabo todo es trucha!

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Es fácil adivinar cuál era el hilo conductor de la sesión: todos los artistas tenían que cumplir uno o varios de los siguientes requisitos: ser abiertamente gayers, iconos de la homosexualidad, jugar al despiste o haber logrado convertir sus canciones en clásicos de la contra natura de ayer, de hoy y de siempre. Para aquellos que gozásteis como perras aquella noche y para las locazas que prefirieron hacerse las chuecas, aquí os dejamos una selección de temazos que hicieron moscatel la pista de baile (y algunos, los últimos, disfrutados por Bone en soledad y delirio):

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